Entra en escena totalmente eufórica

"Anoche me tiré a un tío del Tinder",
exclama con la mejor de sus sonrisas.

Deja el salón para rebuscar entre los
estantes de la nevera. La oigo abrir un
yogur mientras vuelve a mi lado.

"Estaba buenísimo"

Se interrumpe a sí misma metiéndose
una cucharada en la boca.

Me alegro por ella, siento empatía genuina.
Hace meses que no folla.

"¿Cómo se llama?"
le pregunto para mantener el tono confidente.

"Ni idea" responde un poco más tranquila.
"Juan, o Jose, creo" y me mira con cara
de "¿Y qué más da?"

Rectifico en el acto: "¿Estuvo bien?"

Veo cómo su cara se ilumina
mientras ignoro deliberadamente
un poderoso sentimiento de
desconcierto.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por comentar :)