Sentada esperando el metro,
mirando al otro lado de las vías,
o de mis opciones, cuento
azulejos en voz baja.
En voz baja
intento otra cosa.
Una carcajada me
atraviesa por sorpresa.
Salvaje. Casi un grito.
Y callo asustada.
La aparición del
Deseo mientras
cuento azulejos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por comentar :)