fina y cubertería de plata.
Por una vez
no hay entremeses
ni vino añejo.
No hay sopa de pescado.
Por una vez llenamos
la boca de cristales.
De algo que no son
lugares comunes,
anécdotas y chistes.
Comemos palabras
crujientes,
vidrio de arista viva.
Tragamos verdades
Tragamos verdades
que provocan hemorragias.
Que espolean el silencio
y le quitan su lugar en la mesa.
y le quitan su lugar en la mesa.
Llenamos por una vez
la boca de esquirlas.
Que sangran con luz
y voz de herida nueva.
Comida familiar sin
extraños ni desconocidos.
Corazones en la mano,
pecho al descubierto.
Caras sin máscara
ni maquillaje.
Sólo vidrio, corte,
carne y voz ligera.
Sólo gente reunida
con tiempo y ganas.
Sólo nosotros,
los de casa.
Sangre cercana.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por comentar :)