Me arqueo contra el espejo:
la inspiración es de lo más excitante.
Escarcha todo tipo de frutas,
me pone cerezas en los párpados.
A veces coge mi cara
y la baja al nivel del mar.
Me hace lavar el suelo de cuclillas,
lo froto con un trapo mojado.
Cuando limpio para ella
nadie viene a visitarnos.
Nadie me ve sudar, jadear o cantar.
Le gusto mucho, a la inspiración,
soy su amante favorita.
Porque trabajo con diligencia,
como la Reina del Cerámico.
Y sobre todo,
porque puedo estar horas
de rodillas sin perder la sonrisa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por comentar :)